Nuestro Arzobispo, D. José, nos ha convocado, a todos los sacerdotes que estamos en la diócesis de Madrid, a celebrar una Asamblea Presbiteral los días 9 y 10 de febrero del 2026.

Es una oportunidad para dar gracias juntos al Señor por el don de nuestra vocación, tomar conciencia de cómo nos encontramos en estos momentos, compartir cuáles son nuestras preocupaciones, visibilizar nuestra fraternidad sacerdotal viviendo la comunión, y ayudarnos a responder a la Misión ante los apasionantes retos que tenemos para llevarla a cabo. Nos volveremos a preguntar qué pastores necesita hoy Madrid. ¡Un reto para todos nosotros!

Tendremos una fase inicial, que abarcará desde octubre a enero, donde vamos a orar y reflexionar, personal y comunitariamente, sobre cómo estamos, qué necesitamos, cuáles son las mayores preocupaciones de cara a nuestra Misión…

Serán meses donde podremos plantear nuestras propuestas antes de la Asamblea.

En los diez primeros días de octubre, recibiréis los materiales de reflexión:

  • Trabajo personal, para que cada sacerdote pueda ir viéndose interiormente desde la Palabra de Dios, el Magisterio de los Papas y de nuestro Arzobispo y el testimonio de figuras sacerdotales referentes en Madrid. Quien lo desee puede hacer ya propuestas concretas de cara al momento de la Asamblea.
  • Reuniones de arciprestazgo, para tomar el pulso a nuestro quehacer común.
  • Consejos pastorales parroquiales o Asambleas parroquiales. Os pedimos que en este trimestre dediquéis uno de los Consejos pastorales a reflexionar cómo ven nuestras comunidades a los sacerdotes y qué nos dirían. Las conclusiones nos las enviáis antes del 15 de diciembre.
  • Encuentros para la Misión por Vicarias territoriales. En este primer trimestre estudiaremos el Informe sobre el clero de Madrid, así como la realidad y los retos de nuestro Madrid. Igualmente, nos enviáis las propuestas que salgan al tener las reuniones por Vicarias.

Pidamos unos por otros. Preparémonos y ayudémonos, entre los sacerdotes, a este momento de escucha, participación y compromiso de cara a la Misión. ¡Es el Señor quien nos llama a ello! y espera nuestra respuesta.

La Iglesia ( Ekklesia) es la asamblea reunida por el Señor.